Menú        Inicio       Necesita Ayuda            Oración de Arrepentimiento 

Juan 3:16-18

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

JESUCRISTO VENDRÁ A LA TIERRA PARA DESTRUIR LOS DEMONIOS


Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. Apocalipsis 19:11 RVR60.

(( Entonces vi el cielo abierto ) En la  segunda venida de Jesucristo,  como señal, serán  los cielos  abiertos.


(( Y he aquí un caballo blanco )) Los caballos blancos son descrito, como caballos que son usados por los príncipes en los desfiles militares y para las batallas.

(( Y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero )) La palabra (Fiel) significa ( Confiable, Confiabilidad, Verdad, Verdadero, Leal, Lealtad, Veraz, Genuino ), la palabra (Verdadero) significa ( Confiabilidad, Seguro, Certeza, Fidelidad, Ciertamente, Decir la verdad )).

(( Y con justicia juzga y pelea )) Cuando Jesucristo venga a la tierra, va a juzgar, o sea a gobernar. La palabra (Pelea) significa, que va a combatir, que va a guerrear. Jesucristo exterminará a los demonios de todas las naciones para gobernarla (Apocalipsis 19:15). NOTA: Para Jesucristo gobernar, todos los demonios que estén en la tierra tendrán que ser atados, y enviados a los abismos (Apocalipsis 20:7-8). Podemos conocer, que cuando el gadareno se le acercó a Jesús, las legiones de demonios, le dijeron a Jesus "Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo". Los demonios saben lo que le espera (Mateo 8:29). 

Publicaciones recientes

Salvación

Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Romanos 10:9-10.