La voluntad de Dios, se revela en la Biblia y abarca todo lo que Dios ha creado y todo lo que quiere hacer con ello. Algunos aspectos de la voluntad universal de Dios incluyen:
Amor: Dios es amoroso y quiere que todos lo amen a Él y a los demás (1 Juan 4:8).
Santidad: Dios es santo y quiere que sus hijos también sean santos (1 Pedro 1:15-16).
Obediencia: Dios quiere que sus hijos le obedezcan (1 Juan 2:3).
Redención: Dios envió a Su Hijo, Jesucristo, para morir en la cruz por nuestros pecados y redimirnos (Juan 3:16).
Edificación del reino: Dios quiere que su reino crezca en la tierra y que todas las personas lleguen a conocerlo y adorarlo (Mateo 6:10).
La voluntad específica de Dios:
Es el plan específico de Dios para cada individuo. Esta voluntad se revela a través de la Biblia, la oración, las circunstancias de la vida y la guía del Espíritu Santo. Algunos aspectos de la voluntad específica de Dios pueden incluir:
Llamado: Dios tiene un llamado único para cada persona (Efesios 2:10).
Dones y talentos: Dios nos da dones y talentos para que los usemos para servirle a Él y a los demás (1 Pedro 4:10).
Oportunidades: Dios nos presenta oportunidades para hacer Su voluntad en nuestras vidas diarias (Proverbios 16:9).
Sufrimiento: Dios a veces usa el sufrimiento para perfeccionarnos y conformarnos a la imagen de Su Hijo (Romanos 5:3-5).
¿Cómo podemos hacer la voluntad de Dios?
Aquí hay algunos pasos que podemos seguir para hacer la voluntad de Dios en nuestras vidas:
Desarrollar una relación con Dios: Esto implica pasar tiempo en oración, leyendo la Biblia y adorando a Dios.
Buscar la guía del Espíritu Santo: El Espíritu Santo nos ayudará a discernir la voluntad de Dios para nuestras vidas.
Obedecer la Palabra de Dios: La Biblia es nuestra guía para conocer la voluntad de Dios.
Estar atento a las circunstancias de la vida: Dios a menudo nos habla a través de las circunstancias de nuestras vidas.
Buscar el consejo de otros hermanos en la fe: Podemos aprender mucho de otros creyentes que han estado caminando con Dios por más tiempo que nosotros.
Ser paciente: Dios puede revelar Su voluntad a nosotros gradualmente, a medida que crecemos en nuestra relación con Él.
Es importante recordar que hacer la voluntad de Dios no siempre es fácil. Habrá momentos en que tendremos que elegir obedecer a Dios incluso cuando sea difícil o impopular. Pero cuando hacemos la voluntad de Dios, podemos estar seguros de que estamos en su plan perfecto para nuestras vidas.
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