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Juan 3:16-18

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

Nuestro galardón en los cielos


Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos: porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros. Mateo 5:12 RVR60.

<< Gozaos y alegraos >> El cristiano a pesar de las adversidades que esté pasando, debe de saber, que la palabra de Dios, manda a estar (Contentos) y (Alegres) ¿Por qué? porque hay una bendición reservada por los padecimientos que hemos pasado, por nuestra perseverancia y entrega al Señor (Lucas 6:23).

<< Porque vuestro galardón es grande en los cielos >> Hay un galardón (Premio) ¿Dónde? en los cielos. Hay "Cristianos" que lo buscan en la tierra, cuando la Palabra misma dice " En los cielos ", por tanto no hay premios terrenales que se comparen a este, que es (Celestial). No pensemos en la tierra, pensemos en los cielos, donde nos esperan nuestras moradas (Juan 14:2). Este premio es para los cristianos que se han entregado de cuerpo y alma al evangelio de Cristo, padeciendo afrenta y tomado por dignos (Hechos 5:41).

<< Porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros >> Aquí tenemos un ejemplo de lo que es ser seguidor de Cristo: Ser insultado, ser perseguido, ser atacado con todas clases de mentiras (Mateo 5:11) ser aborrecido, ser apartado injustamente, ser vituperados, ser desechado como malo (Lucas 6:22). Todo esto por causa de Cristo Jesús.

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Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Romanos 10:9-10.