(2Samuel 5: 6-10 RVR60)
6- Entonces marchó el rey con sus hombres a Jerusalén contra los jebuseos que moraban en aquella tierra; los cuales hablaron a David, diciendo: Tú no entrarás acá, pues aun los ciegos y los cojos te echarán (queriendo decir: David no puede entrar acá).
7- Pero David tomó la fortaleza de Sion, la cual es la ciudad de David. 8- Y dijo David aquel día: Todo el que hiera a los jebuseos, suba por el canal y hiera a los cojos y ciegos aborrecidos del alma de David. Por esto se dijo: Ciego ni cojo no entrará en la casa. 9- Y David moró en la fortaleza, y le puso por nombre la Ciudad de David; y edificó alrededor desde Milo hacia adentro. 10- Y David iba adelantando y engrandeciéndose, y Jehová Dios de los ejércitos estaba con él.
(V.6) Debemos de conocer que cuando caminamos en la dirección de Dios, rumbo a las promesas que Jehová nos a dado, tendremos oposiciones espirituales satánicas, que saldrán a nuestro encuentro, y nos dirán que no la podremos tomar, y aún más no querrán amedrentar, intimidar, desfallecer.
(V.7) El Cristiano debe de saber en quien a creído, como David, que no se desfalleció, sino que siguió hacia delante su camino, confiando no en sus fuerza, sino en Dios, como poderoso gigante (Jeremías 20:11).
(V.8) Como David, todo cristiano que ha recibido a Cristo en su corazón, como único y suficiente salvador, va ha tener un adversario espiritual, que es el diablo, que se manifestará muchas veces a través de las personas que él dirige, pero debemos de hacer como hizo David, primeramente dependencia de Dios, luego santidad, oración, y en el nombre de Jesús, los adversarios no físicos, sino espirituales serán derrotados.
(V.9) Debemos de tomar nuestra fortaleza, que como a David, Dios se la entregó ¿Y que hizo David para apoderarse de la fortaleza? No se amedrentó por sus adversario que le salieron a su encuentro, Confió en Dios para seguir hacia delante, Enfrentó a sus adversario no con su fuerza, Su dependencia y fidelidad a Dios, le hizo dar la victoria.
(V.10) Siempre tenemos que caminar hacia delante, no importando las oposiciones que salgan a nuestro encuentro, porque cuando Jehová Dios de los ejercito está con nosotros, quien contra nosotros (Ro.8: 31).
DOMINGO CRUZ MINISTERIO.