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Juan 3:16-18

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

El que rechaza la Palabra de Cristo


Juan 12.48  El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.

En este capítulo 12, se da ha conocer lo que es la oposición al ministerio de Jesucristo, por una gran parte de los Judíos, y los líderes principales.

Conocemos entonces en este versículo 48 de Juan, cuando Jesús expresa que el que no recibe sus Palabras le esperará un juicio venidero.

<< El que me rechaza >> Esta palabra (rechazar) significa: Negar completamente que se conoce a una persona. El hombre pecador, rechaza a Cristo, porque no le conoce, porque no se ha arrepentido.

<< Y no recibe mis palabras >> La palabra (recibir) significa: Aceptación. El hombre que no acepta el evangelio de Salvación de Cristo, no lo está recibiendo en su corazón, porque muchas veces no le conoce, aunque lo haya leído, o escuchado, porque no lo ha percibido.

<< Tiene quien le juzgue >> El que rechaza la Palabra de Dios en su corazón, y no se arrepiente ¿Quién le va ha juzgar? La Palabra que le fueron expresada y no la recibió. ¿Y quien es la Palabra? Jesucristo (Juan 1:1).

<< La Palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero >> La Palabra de Dios, va ha juzgar a todos lo que la rechazaron y no se sometieron a ella ¿Cuando? en el día postrero ¿Que significa el día postrero? Significa un período de tiempo transcurrido, en el que se indica que llegará a su fin, para lo que está reservado ¿Y que dice Jesús que está reservado en este versículo? El juicio (Ap. 20:11). 
 

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Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Romanos 10:9-10.