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¿Religiosos dando testimonio de la manifestación del Espíritu Santo?


Hay muchos testimonios entre comillas de personas religiosas, que testifican que fueron libertada, o que fueron sanadas, que recibieron un milagro a través del Espíritu Santo. Vamos a conocer si estos testimonios que escuchamos de personas religiosas son verdadero conforme a la Biblia.

Si estamos en el mundo sin conocer a Jesucristo, atado a vicios, enfermos, o en la situación adversa que fuere, y testificamos que fuimos tocado por el Espíritu Santo el cual nos libertó, o nos sanó, hasta ahí las cosas van bien, pero hay dos situaciones que ponen en dudas esos testimonios, y son las siguientes:

1- Si el milagro ocurrió por el Espíritu Santo, luego no lo va enviar a congregarse a una iglesia donde se adoren imágenes, clamen por los muertos, y haya una mezcla de lo santo y lo demoníaco.

2- Si el milagro ocurrió dentro de una iglesia religiosa, donde se clama a los muertos, ahí no hay presencia del Espíritu Santo. 

Cuando el Espíritu Santo hace la obra regeneradora y de milagros en una persona, es para dirigirla por el camino de la verdad ( Juan 16:13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, Él os guiará a toda la verdad... ) otra referencia Bíblica ( Juan 4:23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren ).

Una persona que testifique que ha recibido un milagro del Espíritu Santo y se congrega en una iglesia que hace lo contrario a lo que la Biblia dice, y esa persona permanece en esa iglesia, no ha recibido ese milagro del Espíritu Santo ( Juan 17:17  Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad), Otra referencia Bíblica ( Salmos 119:105  Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino).

Debemos de conocer que en la religiosidad hay una ceguera espiritual satánica que arropa el entendimiento de las personas, para que no les resplandezca la luz del evangelio de Cristo ( 2Corintios 4:4 En los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios ).

Nos damos cuenta de que en lo referente a manifestaciones espirituales, milagros, el diablo siempre busca imitar a Dios, hasta el punto que se hace pasar hasta por ángel de luz ( Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz ) ¿Para qué se disfraza de ángel de luz? para engañar. Los demonios pueden poner una enfermedad a una persona incrédula, y luego quitarcela temporalmente, para que esa persona diga que fue este santo, que fue la virgen, que fue esto, que fue aquello ( Lucas 13:12 Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad. Lucas 13:16 Y esta hija de Abraham, que Satanás había atado dieciocho años...).

Las personas que han nacido de nuevo dan frutos dignos de arrepentimiento ( Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento ). En estos frutos de arrepentimiento tienen que ir acompañado del  conocimiento de la voluntad de Dios por su palabra, cuando nos arrepentimos, empezamos a conocer el camino de Cristo, y Cristo produce el querer, el hacer en nuestro corazones por la fe que ha depositado el Espíritu Santo.

Debemos de conocer que tenemos que estar edificado sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo (Efesios 2:20).

Sal de la iglesia religiosa, para que no seas partícipe de sus pecados ( Apocalipsis 18:4 Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis participes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas).

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi. Juan 14:6 RVR60.  

 Jesucristo más otra vía de intercesión para llegar a Dios, no se puede conocer a Dios.

Sino es por la fe (Conocer a Jesús) que proviene del Espíritu Santo, no conocemos a Dios.

DOMINGO CRUZ MINISTERIO.

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Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Romanos 10:9-10.